Caldo de pollo y hueso de jamón en olla express

¿Quieres preparar un caldo que tenga el poder de levantar a los muertos? El caldo de pollo y hueso de jamón en olla express es justo lo que necesitas. Con esta receta, te aseguro que no solo ahorrarás tiempo, sino que también conseguirás un caldo lleno de sabor y nutrientes.
La olla express es una herramienta mágica que transforma los ingredientes más sencillos en una delicia en cuestión de minutos. Aquí vamos a combinar el sabor reconfortante del pollo con el toque ahumado del jamón. El resultado: una explosión de sabores que te hará volver por más.
No necesitas ser un chef para clavar esta receta. Solo sigue unos sencillos pasos y tendrás un caldo perfecto para usar en sopas, guisos o simplemente para disfrutarlo solo. ¿Listo para ponerte manos a la obra? ¡Vamos allá!
El pollo en la olla express: ¿cuánto tiempo?
El tema del tiempo de cocción del pollo en la olla express es crucial para que te salga un caldo perfecto. Aquí no hay misterios, pero sí algunos detalles que debes tener en cuenta para que el resultado sea el mejor.
Primero, recuerda que no es lo mismo cocinar un pollo entero que piezas sueltas. Si hablamos de un pollo entero, estamos hablando de unos 25 a 30 minutos desde que la olla alcanza presión. Si es solo la pechuga o los muslos, con 15 a 20 minutos será suficiente.
Al usar la olla express, asegúrate de:
1. Cortar el pollo en trozos medianos si no es entero.
2. Cubrir bien con agua, pero no hasta el tope de la olla.
3. Añadir tus verduras: zanahorias, puerros, apio y un buen hueso de jamón para darle ese toque de sabor extra.
Para darle más sabor, no te olvides de dorar el pollo un poco antes de cerrar la olla. Esto realza los sabores y hace que el caldo sea más rico.
Un truco: Si te pasas de tiempo, la carne del pollo quedará demasiado blanda, casi deshaciéndose. Mejor ajustar bien el tiempo.
Con estos tiempos y consejos, tendrás un caldo de pollo y hueso de jamón que será la base perfecta para sopas, arroces y lo que se te ocurra. ¡A cocinar!
Los beneficios del caldo de huesos
El caldo de huesos es una auténtica joya culinaria y nutricional. No es solo un plato reconfortante, sino que está cargado de propiedades que benefician a tu cuerpo. Aquí te cuento algunos de esos beneficios:
1. Rico en nutrientes: El caldo de huesos está lleno de minerales como calcio, magnesio y fósforo. Estos nutrientes son esenciales para mantener tus huesos y dientes fuertes.
2. Colágeno y gelatina: Los huesos, especialmente los de animales, liberan colágeno al cocerse. El colágeno se convierte en gelatina, que es excelente para tus articulaciones y la salud de tu piel. Te ayuda a mantenerte joven por dentro y por fuera.
3. Apoyo digestivo: La gelatina en el caldo de huesos también puede mejorar tu digestión. Actúa como un agente calmante para el revestimiento de tu estómago y puede ayudar a reducir problemas como la acidez o el síndrome del intestino irritable.
4. Sistema inmunológico: Un buen caldo de huesos, hecho a fuego lento, puede fortalecer tu sistema inmunológico gracias a los aminoácidos y minerales que contiene. Es la razón por la que siempre nos dicen que tomemos caldo de pollo cuando estamos enfermos.
5. Hidratación: Al estar compuesto en su mayoría por agua, el caldo de huesos es una forma sabrosa de mantenerte hidratado. Además, al contener electrolitos naturales, puede ser ideal después de una jornada intensa de ejercicio.
6. Sabor y versatilidad: El caldo de huesos no solo es saludable, sino que también es delicioso. Es una base perfecta para sopas, guisos y salsas, añadiendo profundidad y riqueza a tus platos.
El caldo de huesos es más que una simple sopa; es nutrición en su forma más pura.
Recuerda, si lo haces en una olla express, el tiempo de cocción se reduce, pero los beneficios se mantienen. Así que, ya sabes, a incluir más caldo de huesos en tu dieta. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!
Espero que disfrutes preparando este delicioso caldo de pollo y hueso de jamón en la olla express. ¡Es una receta sencilla pero llena de sabor! Si tienes alguna duda, no dudes en preguntar. ¡Que aproveche y a cocinar se ha dicho!
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