Cómo hacer salsa de tomate con tomate triturado de bote

¿Te apetece una buena salsa de tomate casera, pero no tienes el tiempo ni las ganas de pelar y triturar tomates frescos? No te preocupes, porque hoy te voy a enseñar cómo hacer una salsa de tomate increíble usando tomate triturado de bote. Con unos cuantos ingredientes básicos y unos trucos sencillos, puedes transformar un humilde bote de tomate triturado en una salsa espectacular que hará que cualquier plato brille. Así que, coge tu bote de tomate, un par de cosas más, y vamos al lío.

Cómo quitar la acidez al tomate triturado

Para hacer una salsa de tomate de bote bien rica, hay un truco fundamental: quitarle la acidez al tomate triturado. ¿Cómo se hace? Muy fácil, sigue estos pasos:

1. Añadir azúcar: Este es el truco más conocido. Solo necesitas una cucharadita de azúcar por cada bote de tomate triturado. El azúcar neutraliza la acidez y equilibra el sabor. ¡Ojo! No te pases, que luego la salsa puede quedar demasiado dulce.

2. Bicarbonato sódico: Al añadir una pizca de bicarbonato sódico a la salsa, conseguirás que la acidez disminuya. Este truco es menos conocido, pero muy efectivo. Solo una pizca, ¿eh?

3. Zanahoria: La zanahoria tiene un dulzor natural que ayuda a contrarrestar la acidez del tomate. Pela y corta una zanahoria en trozos grandes y échala a la salsa mientras se cocina. Luego, la retiras antes de servir.

4. Cocinar a fuego lento: Deja que la salsa se cocine a fuego lento durante más tiempo. Esto no solo reduce la acidez, sino que también potencia los sabores.

Un truco extra: añade un chorrito de vino tinto o blanco. No solo reducirá la acidez, sino que también le dará un toque de sabor espectacular.

Recuerda probar la salsa mientras la cocinas y ajustar los ingredientes según tu gusto. Con estos trucos, tu salsa de tomate de bote quedará perfecta y sin acidez.

Diferencia entre tomate frito y triturado

Vale, vamos al grano. Aunque los dos vienen del tomate, el tomate frito y el tomate triturado tienen diferencias importantes que afectan tanto al sabor como al uso en la cocina.

• Tomate triturado: Es básicamente tomate fresco que ha sido triturado o picado en trozos pequeños. No tiene cocción previa, por lo que conserva su sabor natural y un poco ácido. Encontrarás que tiene más textura y es ideal para recetas que requieren una base más sólida de tomate.
• Tomate frito: Este ya ha pasado por una cocción previa, generalmente con aceite, ajo y cebolla. Al estar cocido, su sabor es más suave y dulce, y la textura es mucho más homogénea. Va genial para salsas que necesitas que sean más suaves y sin tropezones.

El tomate triturado es perfecto para cuando quieres un sabor más fresco y natural, mientras que el tomate frito es tu mejor amigo para salsas más elaboradas y suaves.

Recuerda esto cuando hagas tu salsa de tomate con tomate triturado de bote. ¡Va a quedar espectacular!

Espero que te haya resultado útil y que disfrutes de tu salsa de tomate casera. Si te ha gustado, no dudes en probar otras recetas. ¡Hasta luego!