Cómo hacer una paella de marisco y pollo

¿Listo para embarcarte en la aventura de preparar una paella de marisco y pollo? Este plato, que es todo un clásico de la gastronomía española, combina lo mejor del mar y la tierra en un solo bocado. Imagina el aroma de los mariscos frescos mezclado con el delicioso sabor del pollo bien dorado, todo ello impregnado en un arroz suelto y sabroso. No necesitas ser un chef profesional para conseguirlo; con esta guía, cualquier persona puede lograrlo. ¡Vamos a ello!

El secreto del sabor en la paella

¿Quieres saber cuál es el truco para que una paella sea inolvidable? El secreto del sabor en la paella, ya sea de marisco o pollo, radica en varios puntos clave. Aquí te dejo lo esencial:

• Sofrito: El alma de la paella. Un buen sofrito con tomate, pimiento, ajo y cebolla (sí, cebolla, aunque algunos puristas dirán que no) es imprescindible. Cocínalo a fuego lento hasta que todo esté bien pochado y casi caramelizado.
• Caldo: Nada de usar agua, usa un buen caldo casero. Si es de marisco, mejor. Hierve las cabezas de las gambas y los restos del pescado para hacer un caldo potente. Si es de pollo, usa carcasas y verduras.
• Azafrán: El verdadero toque de distinción. No escatimes. El azafrán le da ese color y sabor único. Tostarlo un poco antes de añadirlo al caldo realza su aroma.
• Arroz: Usa arroz bomba o calasparra. Absorben bien el caldo sin pasarse de punto.
• Fuego: Aquí no vale cualquier cosa. Si puedes cocinarla en leña, mejor. Si no, usa fuego fuerte al principio y luego bájalo. El punto del arroz dependerá mucho del control del fuego.

Un buen sofrito y un caldo potente son la base de una paella con sabor increíble. No te olvides de la proporción exacta de arroz y caldo: por cada taza de arroz, dos y media de caldo. Y sobre todo, no remuevas el arroz una vez que has añadido el caldo, deja que se cocine tranquilo.

El auténtico secreto es el balance y la paciencia. Una paella no se hace con prisas.

Ahora que tienes estos trucos, ¡manos a la obra! Seguro que tu paella será la estrella de cualquier reunión.

Proporción de agua y arroz en una paella

Para que la paella te salga de lujo, la proporción de agua y arroz es fundamental. En una paella de marisco y pollo, la regla básica que no falla es usar el doble de agua que de arroz. Es decir, por cada taza de arroz, echa dos tazas de agua.

Lo ideal es usar un buen caldo en lugar de agua sola, ya sea de marisco, de pescado o de pollo, dependiendo de los ingredientes principales. Esto le dará mucho más sabor.

1. Para un arroz suelto y bien cocido, la proporción es 1:2 (arroz:agua).
2. Si usas arroz bomba, que es el más común para paellas, la proporción es un poco diferente: 1:2.5 (arroz:caldo).

Ten en cuenta que el caldo debe estar caliente cuando lo añadas al arroz para que no pierda temperatura y se cueza de manera uniforme.

Una buena paella se cocina a fuego medio. Eso garantiza que el arroz se cocine bien y que los sabores se mezclen de manera adecuada.

Otra cosa importante es el tiempo de cocción, que suele ser de unos 18-20 minutos para el arroz bomba. No olvides dejar reposar la paella unos 5 minutos después de apagar el fuego para que el arroz termine de absorber todo el líquido.

¡Y ahí lo tienes! Con estos trucos, tu paella de marisco y pollo será la estrella de cualquier comida.

Espero que disfrutes preparando esta paella de marisco y pollo tanto como yo disfruté escribiendo esta receta para ti. ¡Aprovecha cada bocado! ¡Nos leemos pronto!